En un mundo donde los avances tecnológicos y la inteligencia artificial están transformando la forma en que trabajamos, el CEO de OpenAI, Sam Altman, parece tener un plan B para cuando sus robots nos dejen sin empleo. OpenResearch, respaldada por Altman, acaba de completar el mayor estudio de ingresos básicos en EE.UU., distribuyendo US$1,000 mensuales a 1,000 participantes durante tres años.
El perfil de los participantes
Todos los beneficiarios del estudio se encontraban por debajo del 300% de la línea de pobreza federal, con ingresos promedio de US$29,000 anuales. Este perfil permitió evaluar el impacto del ingreso básico en un grupo vulnerable y representativo de la población estadounidense.
¿Los resultados?
El estudio arrojó resultados reveladores y positivos:
- Los participantes gastaron más en necesidades básicas y en ayudar a otros, sin abandonar la fuerza laboral, aunque trabajaron un poco menos.
- Se observó una mejora en los hábitos de ahorro y en los planes de educación superior.
- Hubo un aumento del 26% en las visitas al hospital, indicando que, con dinero extra, las personas ya no ignoraban problemas de salud por falta de recursos.
¿Por qué es importante?
Con más de 150 programas similares en 35 estados de EE.UU., y líderes tecnológicos como Elon Musk y Jack Dorsey apoyando la idea, el concepto de ingreso básico universal está ganando terreno. La implementación de estos programas podría ser crucial para enfrentar los desafíos económicos y sociales que surgen con la automatización y la IA.
Mirando al futuro
Este estudio de OpenResearch podría ser el inicio de algo grande. Imagina un futuro donde los robots hagan el trabajo pesado y tú recibas un cheque mensual solo por existir. ¿Utopía o distopía? Esa es la pregunta que debemos responder. Sin duda, el debate sobre el ingreso básico universal continuará mientras exploramos cómo adaptarnos a un mundo cada vez más automatizado.
La iniciativa de Sam Altman y OpenResearch nos ofrece un vistazo a un posible futuro donde la tecnología y el bienestar social pueden coexistir, ofreciendo una red de seguridad financiera para todos.
